A sus 18 años de edad, Marian Vivas ya tiene mucho que contar. Ha estado en dos ocasiones en el programa de verano de Berklee College of Music, ha sido finalista de La Siembra del Cuatro, ha cantado el Himno Nacional en el Festival Jonrón Pepsi y ha actuado como telonera de C4 Trío. Muy buen currículum para alguien que apenas está graduándose de bachiller. Pero eso no es lo más relevante. Lo es su soltura en el escenario, que quedó demostrada en su primer concierto solista, presentado a sala llena en Noches de Guataca.
Es el primer viernes de julio y el público, ubicado en los Espacios Abiertos del Centro Cultural BOD, está deseoso de conocer la propuesta en solitario de la artista. Ella, cuatrista, flautista y cantante formada en el Colegio Emil Friedman de Caracas, arranca su recital interpretando en solitario “Guitarrero”, la pieza con la que logró llegar a la final del Festival La Siembra del Cuatro en 2019. Tras recibir los primeros aplausos de la noche, invita a su mentor Félix Crudele a hacer con ella una versión a dos cuatros del bossa “Desafinado”, de João Gilberto.
Al escenario suben Isidro Landaeta, Carlitos Suárez y Nelson Echandia, los integrantes de Suena4, quienes son los acompañantes oficiales de Marian en esta gala. Con ellos hace el merengue “A mis hermanos”, de Aquiles Báez; toca la flauta en la pieza “Dos Carlos”, de Henry Martínez; y canta “Ojos color de los pozos”, de Alberto Arvelo Torrealba (con la participación del percusionista Andrés Nali Guillén).
“Esta muchachita va a ser más famosa que Shakira”, comentan unas señoras desde el público, tras oírla cantar e improvisar con la flauta un par de joyas del cancionero venezolano: “La Negra Atilia” (Henry Martínez y Pablo Camacaro) y “Acidito” (Adelis Freitez), que le dan pie a la entrada del maestro Cheo Hurtado, con quien Marian toca el vals de Antonio Lauro “Angostura”, en esta ocasión a dos cuatros.
Tras cantar la gaita “Promesa”, popularizada por Caibo, Marian se toma un tiempo para confesar su admiración por Nella, la margariteña ganadora del Latin Grammy: “Por favor, etiquétenla para que sepa que existo”, bromea (horas más tarde, la propia Nella compartiría en sus historias de Instagram un fragmento de la versión de “Solita”, que Marian cantó en el concierto).
La artista canta dos temas de Guaco (“Si usted la viera”, de Jorge Luis Chacín; y “Pídeme”, de Pedro Alonso) y un par de Servando y Florentino (“Muchas mamás” y “Te regalo la luna”). A esas le siguen “Ojalá que llueva café”, de Juan Luis Guerra; y “Jolene”, de Dolly Parton, para cerrar el concierto con “Suena venezolano”, arreglado por Carlos Suárez, en el que tanto ella como los Suena4 demuestran su virtuosismo.
Como regalo al público, Marian y los músicos repiten “Te regalo la luna”. Ahí, con todo el público de pie lanzando vítores, la artista se bautiza como una de las jóvenes promesas de la música venezolana. Quizá se cumpla lo que dijeron en la audiencia, y llegue a ser famosa, muy famosa. El tiempo lo dirá.